El nuevo etiquetado frontal de alimentos mexicano, que entra en vigor este 1 de octubre en una primera fase, es una de las regulaciones «más avanzadas del mundo y un ejemplo para la región», aseveró este miércoles un representante de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
«El etiquetado está basado en evidencia científica. La implementación de esta medida podría ayudar a la reducción del consumo de exceso de nutrientes dañinos», dijo en conferencia de prensa, el doctor Fabio Gomes, asesor regional en nutrición y actividad física para las Américas en la OPS/OMS.