Los paleontólogos han añadido otra fotografía nuestro álbum familiar ancestral con el hallazgo de uno de los fósiles más antiguos que puede ser relacionado a los ancestros humanos.
El equipo de investigadores analizó 45 fósiles de tamaño similar al de un grano de arroz encontrados en rocas sedimentarias de la provincia china de Shaanxi y determinó que pertenecían a una especie de animal que está por ser descrita distantemente relacionada con los humanos.
Su nombre, Saccorhytus coronarius, hace referencia a su cuerpo similar a un costal y su boca parecida a una corona.
Se piensa que éste diminuto ancestro de todos los vertebrados se asentó entre los granos de arena del suelo marino antiguo en el periodo Cámbrico – hace aproximadamente 540 millones de años.
Su hallazgo nos ayuda a completar una pieza en el rompecabezas de una categoría de organismos llamados deuteróstomos, a los que pertenecemos los humanos – junto con las estrellas de mar, los pepinos de mar y los gusanos bellota.
Durante el periodo Cámbrico, los deuteróstomos primitivos se diversificaron rápidamente en largos números de grupos variados. Evidencia de estos descendientes pueden ser encontradas en rocas que datan hace unos 500 mil millones de años , pero las distinciones masivas entre distintos grupos, junto que su rápida divergencia, ha dificultado imaginar como se veían los primeros deuteróstomos.
Utilizando diferencias genéticas en los deuteróstomos modernos como una forma de ‘reloj molecular’, los biólogos han estimado cuando se dividió este bloque de organismos.
Con el nuevo hallazgo, los paleontólogos ahora tienen una impresión mucho más clara de la apariencia de estos ancestros.
Simon Conway, investigador del equipo de la Universidad de Cambridge, explicó:
“Pensamos que un deuteróstomos temprano como esté puede representar los inicios primitivos de un rango muy diverso de especies, incluyendo la nuestra. A simple vista, los fósiles estudiados parecen diminutas semillas negras, pero bajo el microscopio su nivel de detalle es impactante. Todos los deuteróstomos tenían un ancestro en común y pensamos que es éste.”
Los hallazgos han sido publicados en el diario Nature.
