En vísperas de la fiesta de la Epifanía, que la tradición católica relaciona con la llegada de los Reyes Magos, el Papa Francisco sorprendió a niños enfermos con una visita sorpresa a un hospital pediátrico.
La tarde de este viernes, el pontífice se apareció sin previo aviso en la sede Palidoro del Hospital Pediátrico “Bambino Gesù” (del niño Jesús), institución que es propiedad del Vaticano ubicada a 30 kilómetros al norte de Roma.
De acuerdo con la sala de prensa del Vaticano, Francisco recorrió los diversos pabellones saludando a los niños internados, con quienes se entretuvo con juegos y bromas, además de dedicar palabras de aliento a los padres que los asisten.
El encuentro comenzó a las 15:00 horas locales (14:00 GMT) e incluyó saludos con los trabajadores y el equipo médico del hospital. Fue “una tarde de alegría, sonrisas y sobre todo mucha esperanza en el camino de la difícil prueba de la vida para los pequeños”, añadió el Vaticano.
Con ese gesto, el Papa quiso continuar la tradición de los llamados “Viernes de la Misericordia”, las visitas sorpresa a enfermos y necesitados, que él mismo estableció durante el último Año Santo Jubilar.
La mañana de este sábado 6 de enero, Francisco celebrará la misa de la Epifanía en la Basílica de San Pedro del Vaticano y luego bendecirá, desde la ventana de su estudio personal en el Palacio Apostólico a una multitud congregada en la Plaza de San Pedro.
