Será a partir del 24 de enero próximo cuando se tenga una versión final de lo que podría ser el etiquetado para los llamados alimentos con alto contenido calórico, afirmó Alejandro Calvillo, director del Poder del Consumidor (EPC).
Entrevistado previo a la entrega de los premios a la publicidad chatarra, el dirigente expresó que en esa fecha se podrá saber cómo será el etiquetado, bajo qué advertencia el producto es alto en azúcares, grasa, sodio, calorías, así como edulcorantes no calóricos ni cafeína, no apto para niños.
Precisó que estos últimos puntos no forman parte de la ley que ya fue aprobada por la Cámara de Diputados sobre el etiquetado frontal, pero son propuestas que ha hecho el Comité Nacional de Normalización a la modificación de la Norma 051 del Etiquetado de Alimentos y Bebidas no Alcohólicas.
Las pérdidas económicas, alertó, son muy graves y recordó lo dicho por el secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), José Ángel Gurría, que la obesidad resta hasta cinco años de vida a los mexicanos y que el impacto en el Producto Interno Bruto sea mayor a cinco por ciento.
Esas cifras, añadió, son más de 10 veces el presupuesto que tiene asignada la Secretaria de Salud.
En materia de publicidad enfocada a niños para fomentar el consumo de marcas, comentó que empresas como Bimbo se ha adaptado a ajustar su publicidad en países como Perú y Uruguay, y Kellogg’s en Chile, entre otras.
Alejandro Calvillo dijo que las empresas vulneran los derechos de los niños al ofrecer contenidos de ese tipo, ya que los niños son «muy vulnerables» a esos anuncios.
