Varias asociaciones empresariales de Estados Unidos manifestaron este miércoles su creciente inquietud ante la incertidumbre que los nuevos aranceles globales, anunciados por el presidente Donald Trump, podrían generar en el panorama económico del país.
La Mesa Redonda de Negocios, que representa a directores ejecutivos de importantes compañías, emitió un comunicado en el que advierte que los aranceles “corren el riesgo de causar graves daños a los fabricantes, trabajadores, familias y exportadores estadounidenses”. La asociación subrayó que el impacto negativo en la economía se intensificará con la prolongación de estas medidas, enfatizando la posibilidad de represalias por parte de otras naciones.
Antes del anuncio presidencial, la Cámara de Comercio de Estados Unidos ya había señalado que la imposición de gravámenes a las exportaciones “elevará los precios para los consumidores estadounidenses y perjudicará la economía”. En este sentido, instó a los responsables políticos a desviar su enfoque hacia estrategias que promuevan el crecimiento económico.
La Fabricación Nacional de Minoristas también se unió a las voces de alarma, advirtiendo que los aranceles crearán “mayor incertidumbre para las empresas y los consumidores estadounidenses”. La asociación enfatizó que “los aranceles no los pagan países ni proveedores extranjeros, sino los importadores estadounidenses”, poniendo de relieve la carga que recaerá sobre las empresas locales.
Por su parte, la Asociación de Distribuidores y Minoristas de Calzado de Estados Unidos calificó la medida como “catastrófica para las familias estadounidenses”. Un representante de la organización expresó su decepción ante el enfoque amplio de los aranceles, sugiriendo que estas políticas solo servirán para incrementar los costos, reducir la calidad de los productos y debilitar la confianza del consumidor.
El presidente Trump anunció un arancel base del 10% que se aplicará a todos los países que, a su juicio, imponen barreras comerciales a los productos estadounidenses, sumando aranceles adicionales para lo que considera los “peores infractores”. Las tarifas específicas incluyen un 34% para las importaciones de China, un 20% para la Unión Europea, un 24% para Japón, un 26% para India, un 17% para Israel y un 10% para la mayoría de naciones latinoamericanas. El arancel mínimo del 10% está programado para entrar en vigor el sábado 5 de abril, mientras que las tarifas adicionales comenzarán a aplicarse el 9 de abril.
Con esta serie de medidas, la administración Trump enfrenta un creciente descontento entre el sector empresarial, que advierte sobre las repercusiones negativas que podrían derivarse de estas políticas comerciales.
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