Dos cabezas de caballo guardan en el sur del neoyorquino barrio de Manhattan la entrada de Chess Forum, un negocio que recuerda más a un viejo desván de anticuario que a una tienda, un pequeño reino de 64 casillas que resiste a duras penas el imparable asedio de internet.
«Esto es como un parque jurásico y yo soy como un dinosaurio. Hay mucha gente que entra y me dice: ¿Todavía estás aquí? Y no sé si tomármelo como un cumplido o un insulto. La gente se sorprende de que lugares como este todavía existan», asegura a Efe Imad Khachan, el responsable de que este negocio se mantenga en pie desde que abrió sus puertas en 1995.