El gasto del Senado en servicios de alimentación, tanto dentro como fuera de sus instalaciones, experimentó un aumento del 43.6% en 2025 en comparación con el año anterior, según revela el Informe sobre Contrataciones del primer trimestre del año en curso. Este incremento se produce pese a las controversias y cancelaciones de contratos relacionados con supuestos actos de corrupción en años previos.
En 2024, la Cámara alta destinó hasta 13.9 millones de pesos a dos empresas proveedoras de alimentos, mientras que en 2025, la contratación se concentró en una sola firma por 20 millones de pesos, incluyendo el IVA. La empresa contratada para este año fue Mobiliarios Mifflin S.A. de C.V., especializada en servicios de alimentación intra y extramuros, en sustitución de los contratos previos con Mise en Place SJA, S.A. de C.V. y Especialidades Comerciales Reyes, que en 2024 representaron un gasto máximo de aproximadamente 6.96 millones de pesos cada una.
Este aumento en los gastos, que contrasta con las cancelaciones anteriores, plantea cuestionamientos sobre las políticas de contratación del Senado y la gestión de recursos en un contexto de denuncias y auditorías por irregularidades en contratos previos. La adquisición de un solo proveedor por un monto significativamente mayor refleja un cambio en la estrategia de contratación, que ahora concentra la compra en una sola empresa, con posibles implicaciones en la transparencia y competencia del proceso.
