El mexicano Sergio Pérez (Red Bull), que concluyó segundo este domingo el Gran Premio de Azerbaiyán, el octavo del Mundial de Fórmula Uno, declaró en el circuito urbano de Bakú, donde logró su vigésimo podio en la categoría reina, que haber acabado en esa posición «no está nada mal» y que ha sido «un gran resultado para el equipo», que festejó el tercer ‘doblete’ en lo que va de temporada.
«Perdimos la parada del coche de seguridad virtual, debido a una mala comunicación; y luego entramos tarde en boxes. Después, tuve mucha degradación con el neumático medio; era extremadamente grande la degradación», explicó nada más bajarse del coche ‘Checo’ , nacido hace 32 años en Guadalajara (Jalisco) y que hace un año festejó en esta pista una de sus tres victorias en la F1.