El papa Francisco pidió hoy a religiosos y políticos que colaboren en Canadá para esclarecer lo ocurrido en el reciente hallazgo de una fosa común con restos de 200 niños indígenas en un antiguo internado de la Iglesia Católica en la provincia canadiense de Columbia Británica (oeste del país).
«Me uno a los obispos canadienses y a toda la Iglesia católica en Canadá para expresar mi cercanía al pueblo canadiense traumatizado por la chocante noticia. El hallazgo incrementa la conciencia del dolor y del sufrimiento del pasado. Que las autoridades políticas y religiosas de Canadá sigan colaborando con determinación para aportar luz sobre ese triste suceso y se comprometan con humildad a recorrer un camino de reconciliación y sanación», dijo el pontífice, tras el rezo del Ángelus.