Mar-a-Lago, Florida – En un contundente discurso, el presidente Donald Trump defendió la decisión de imponer aranceles a México y Canadá, afirmando que «vale la pena el precio que haya que pagar» para combatir el tráfico de fentanilo y otras drogas que amenazan la seguridad de Estados Unidos. Las medidas, firmadas en tres órdenes ejecutivas durante su estancia en su residencia privada, entrarán en vigor a las 00:01 del martes 4 de febrero.
Trump, quien ha hecho de la lucha contra el narcotráfico una de las piedras angulares de su administración, argumentó que tanto México como Canadá tienen una responsabilidad significativa en el flujo de sustancias ilegales que ingresan al país. En su declaración, el mandatario lanzó acusaciones severas hacia los gobiernos de ambos países, enfatizando que sus acciones están poniendo en peligro el “tejido social” de Estados Unidos.
Las órdenes ejecutivas no solo establecen los aranceles, sino que también contienen advertencias explícitas a México y Canadá: cualquier intento de represalia podría resultar en un aumento adicional de los aranceles o en la ampliación de los productos afectados. Sin embargo, a pesar de estas advertencias, ambos países reaccionaron rápidamente, anunciando sus propias medidas en respuesta a la situación.
El clima de tensión generado por estas decisiones refleja un enfoque cada vez más agresivo del gobierno estadounidense en materia de comercio y seguridad. Mientras Trump sostiene que estas acciones son necesarias para proteger a los ciudadanos estadounidenses, críticos advierten que podrían desatar una guerra comercial que afectaría las economías de los tres países involucrados.
Con información de López-Dóriga.