Las “buenas intenciones” del presidente, Joe Biden, de crear políticas migratorias «justas y humanas» son insuficientes para enfrentar la llegada a la frontera con México de miles menores que arriban solos, que enfrentan un sistema que repite el trauma de la separación familiar y la ausencia de un trato humanitario, denuncian activistas, abogados y allegados.
Victoria, de 17 años, cruzó hace una semana la frontera por McAllen (Texas). Su madre se quedó en Guatemala y la menor buscaba encontrarse con sus tíos Alicia y Nicolás Jut en California, pero al día de hoy solo se les ha informado que será asignada a una “casa hogar” para que después pueda ser reclamada legalmente.