El subsecretario de Salud de la Ciudad de México, Juan Manuel Castro Albarrán, informó que el abasto de medicinas en las unidades de salud de los hospitales del gobierno local es de 81.33 por ciento y 75 por ciento en material de curación, lo que desató un debate en el Congreso.
Durante una mesa de trabajo con la Comisión de Salud del Congreso capitalino, el subsecretario de Prestación de Servicios Médicos e Insumos de la dependencia afirmó que las ampliaciones de contratos, procesos licitatorios y adjudicaciones permitieron este nivel de abasto de medicinas
“Hay cosas que dependen de la Federación, pero la ciudad ha participado, por ejemplo, en la compra de medicamentos para el VIH/Sida a nivel nacional, con asesoría y participación directa para la adquisición de medicinas cuando hubo un potencial de desabasto nacional”, recordó.
“En la Ciudad de México nunca tuvimos desabasto para VIH/Sida y hasta fuimos solidarios con Chiapas, Veracruz, Guerrero y Michoacán en la entrega de medicamentos que lograron contener una crisis en esas entidades”, dijo.
En el Pleno del Congreso capitalino el rechazo de un Punto de Acuerdo de urgente y obvia resolución del diputado Christian Von Roehrich, del PAN, para pedir a las autoridades federales garanticen el abasto de medicamentos y la aprobación de otro de la diputada Lourdes Paz, de Morena, confrontó a ambas bancadas otra vez.
Diputados de ambos partidos se acusaron mutuamente de tener la responsabilidad del desabasto de medicamentos y a la disputa se subió el diputado Jorge Gaviño, del Partido de la Revolución Democrática, quien calificó a los morenistas de insensibles e inhumanos.
El perredista reprochó a los de Morena de importarles más comprar periódicos, en referencia a los libros de compilación sobre el diario Regeneración de los hermanos Flores Magón que adquiriría ese órgano legislativo, que el problema de abasto de medicinas.
Mientras Von Roehrich acusaba de que un Punto de Acuerdo similar propuesto por el diputado Guillermo Lerdo de Tejada, del PRI, también se rechazó la semana pasada por la mayoría de Morena, el legislador de éste partido Carlos Castillo, al ser rechazado con una pregunta al orador, le hizo una seña grosera.
En respuesta, el legislador del PAN lo retó a que de frente y fuera del recinto de Donceles y Allende se atreviera a repetir esa seña, pero Castillo Pérez, quien mide cerca de dos metros de estatura, sólo se replegó en su curul con el rostro sonriente.
El panista recordó que como representantes populares no están para defender al presidente en turno ni a los gobernantes y reprochó que cuando se trata de una propuesta de Morena todos los legisladores votan en bloque, pero cuando es de la oposición la rechazan.
En tanto la legisladora Valentina Batres Guadarrama, de Morena, acusó a la administración pasada por el “desabastamiento” de medicinas y aseguró que el más de 80 por ciento de cobertura se logró gracias al actual gobierno, porque al recibir la administración sólo era de 70 por ciento.
El panista Von Roehrich corrigió a Batres Guadarrama y junto con Jorge Gaviño pidieron a Morena asumir que son gobierno, y que a casi un año de iniciada la gestión no se vale echar culpas a las administraciones anteriores pues la compra de medicinas es anual.
