El Comité de la ONU sobre los Derechos de Personas con Discapacidad ha denunciado que en Corea del Norte se están llevando a cabo experimentos médicos y científicos con personas que tienen discapacidades psicosociales e intelectuales, prácticas que podrían constituir formas de tortura y maltrato. En su informe publicado este miércoles, el organismo internacional solicitó a las autoridades norcoreanas la prohibición inmediata de estas acciones.
El documento también revela que estas personas son sometidas a tratos degradantes, incluyendo encierros en aislamiento por desobediencia o “improductividad”, así como la negación de atención médica. Además, se reportan casos de violencia, abusos, castigos físicos y la administración de químicos en personas que no cumplen con cuotas de trabajo forzado, tanto en prisiones como en casos de repatriados.
El informe detalla denuncias creíbles de infanticidios de niños con discapacidades, algunos en instalaciones médicas con permisos oficiales, así como abortos y esterilizaciones sin consentimiento de mujeres con discapacidad. También se señalan políticas eugenésicas y discriminatorias diseñadas para “prevenir” discapacidades, en línea con prácticas de segregación y exclusión social.
Asimismo, el comité denuncia que las personas con discapacidad enfrentan restricciones para contraer matrimonio, adoptar y acceder a oportunidades laborales, siendo frecuentemente relegadas a puestos “adaptados” que limitan su integración social. Estas condiciones reflejan una grave vulneración de sus derechos fundamentales, según el informe.
El documento forma parte de la vigilancia del cumplimiento de la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, firma de Corea del Norte, y pone en evidencia la necesidad urgente de acciones internacionales para proteger a este colectivo en el país.
