¿Todo tiene un fin? Uno de los momentos más difíciles que puede enfrentar una pareja, y un individuo, es el aceptar que la relación terminó. Los motivos pueden ser diversos: ya no hay amor, existe una infidelidad o simplemente ya no hay un futuro. Sin embargo, ¿cómo sobrevivir a ello?
La inseguridad y el miedo de enfrentar la vida sin una persona al lado, es el principal bloqueo, es la emoción que “paraliza” y obliga a seguir en una relación que ya no se disfruta y en el fondo no estamos tan convencidos de seguir”, así lo indica, en entrevista la psicóloga Roxana Pérez Terán.
Temor, amor y dolor
Aceptar que la relación se terminó no es fácil, aún más por todos los sentimientos y confusión que se experimenta, por ello la experta Pérez Terán te da algunas formas de lograrlo.
1. Primero tú. Es fundamental trabajar en tu autoestima, darse cuenta que eres una persona fuerte, que puede superar cualquier separación y capaz de terminar con una relación en la que ya no eres feliz.
2. Descubrir. Aprende a disfrutar tu soledad, a quererte y a estar en armonía contigo mismo, solo si puedes estar solo y en paz, podrás lograr tener una relación madura, en la que no exista dependencia emocional y maltrato.
3. Sé tú mismo. Tener claro qué estás dispuesto a aceptar y no en una relación, para que actúes de una forma congruente con tus valores y límites establecidos.
4. Solo hay un hoy. La vida es breve y debes disfrutarla en todo momento. No veniste a este mundo a sufrir, piensa que cada minuto que pasas triste, es un minuto que podrías sonreír y disfrutarlo.
5. Realiza lo que te gusta. Sal, actívate, retoma actividades que habías abandonado, sal con amigos, hazte un cambio de look. Después de una separación tu vida no ha terminado, al contrario, apenas está comenzando.
Sin embargo, si no puedes vivir sola, y necesitas un compañero y aplicas la de “un clavo saca a otro”, es mejor que lo pienses dos veces.
Si empiezas una relación antes de haber vivido todas las etapas del duelo, solo vas a enmascarar ese dolor y no solo te estarás lastimando a ti, sino a tu nueva pareja. Prepárate entonces para las comparaciones y recuerdos dolorosos”, así lo indica Roxana Pérez.
Recuerda que en tus manos está tu salud, no solo física sino emocional. ¡Cuídate!
