Bruno Marioni no tuvo el debut soñado como director técnico. Carlos Fierro provocó que el ahora estratega argentino sufriera la primera derrota en su recién iniciada carrera, luego de marcar el único gol de la noche, con el que también las Chivas ganaron su primer partido dentro de la Copa MX.
Y aunque fue por la mínima diferencia, el Rebaño Sagrado supo reflejar en el marcador el dominio que plasmó en el terreno de juego, principalmente en la primera mitad, donde consiguió el tanto que al final le dio los tres puntos, para llegar a cuatro e igualar en unidades a los Potros del Atlante.
Una jugada bastó para que el cuadro tapatío saliera con el triunfo. Jugada en la que Fierro mostró gran calidad para bajar una pelota, tras un pase fuerte a los linderos del área, dirigirla hacia la portería rival y fulminar al arquero con un disparo cruzado de pierna derecha que se incrustó en el tiempo de compensación de los primeros 45 minutos.
Mérida intentó nivelar el juego en la parte complementaria, y pese que logró calmar a la ofensiva de las Chivas, le faltó inteligencia y creatividad para generar peligro en el marco rojiblanco.
Sobre el final del duelo, el Rebaño recuperó el dominio, sin embargo ya no pudo llevarlo al electrónico. Solo le alcanzó para mantener a raya a un motivado equipo local, que terminó cargando con su segunda derrota y en el fondo del Grupo 6 de la Copa MX.