Un tribunal de segunda instancia en Brasil dictaminó este jueves una condena económica contra el expresidente Jair Bolsonaro, por comentarios considerados con connotación sexual acerca de adolescentes venezolanas. La sentencia impone al exmandatario una indemnización de 150.000 reales (aproximadamente 27.160 dólares) por daños morales colectivos, en un proceso que evaluó sus declaraciones durante la campaña presidencial de 2022.
La decisión fue tomada por la Quinta Sala Civil del Tribunal de Justicia del Distrito Federal de Brasilia, que concluyó que Bolsonaro violó derechos fundamentales de niños y adolescentes al sexualizar a menores en situación de vulnerabilidad. La resolución reconoce que sus expresiones generaron un daño colectivo, en línea con la acusación presentada por la Fiscalía.
El proceso judicial inició tras una denuncia de la fiscalía que, en su momento, consideró que las declaraciones del exmandatario constituían un daño moral a las menores. En una transmisión en vivo, Bolsonaro relató un encuentro que tuvo en una motocicleta con adolescentes venezolanas en una comunidad cercana a Brasilia, en el que hizo comentarios con evidente connotación sexual.
Según su relato, observó a varias jóvenes de 14 y 15 años y, ante una supuesta atracción, les preguntó si podía ingresar a sus casas. En sus palabras, describió a las adolescentes como “bonitas” y mencionó que estaban arreglándose en un sábado, cuestionando si esa situación respondía a su necesidad de trabajo o si querían algo más. Estas declaraciones fueron interpretadas por la justicia como un estímulo a la vulnerabilidad de las menores y un acto que excedió los límites de la libertad de expresión.
Aunque en primera instancia un juez civil rechazó la acusación y la solicitud de indemnización, la Cámara revisora consideró que, si bien parte de los argumentos no eran procedentes, las declaraciones del expresidente causaron un daño colectivo, especialmente en el contexto de vulnerabilidad social y migratoria de las adolescentes involucradas.
La sentencia ordena que la indemnización sea destinada al Fondo de los Derechos de la Infancia y de la Adolescencia, un fondo público que financia proyectos en favor de los derechos de menores en Brasil. La jueza Leonor Aguena enfatizó que las expresiones de Bolsonaro tuvieron una “connotación sexual inaceptable” y que la figura pública debe actuar con responsabilidad para evitar la reproducción de prejuicios que afecten la dignidad de las menores y la percepción social sobre la vulnerabilidad de niñas inmigrantes y pobres.
Por su parte, el abogado del exmandatario, Marcelo Bessa, expresó su sorpresa por la condena y anunció la intención de presentar un recurso ante el Tribunal Superior, considerando que la decisión podría contradecir precedentes en la jurisprudencia brasileña.
Este fallo refleja la creciente atención en Brasil hacia la protección de los derechos de menores y la responsabilidad de figuras públicas en el uso del lenguaje y las declaraciones públicas.