El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, volvió este jueves a desincentivar la vacunación contra la covid-19 en niños y minimizó las muertes en ese grupo poblacional, un día después de que su Gobierno incluyera a regañadientes a los menores de entre 5 y 11 años en la campaña nacional de inmunización.
El mandatario, uno de los líderes mundiales más negacionistas sobre la pandemia, advirtió, sin aportar pruebas, de «posibles efectos colaterales a partir de los 22, 23 o 24 años», si los padres deciden vacunar hoy a sus hijos contra el coronavirus.