En un movimiento decisivo, Bélgica anunció que reconocerá oficialmente al Estado de Palestina durante la próxima Asamblea General de la ONU en Nueva York, en respuesta a la grave crisis humanitaria que atraviesa la Franja de Gaza. La decisión fue comunicada por el ministro de Asuntos Exteriores, Maxime Prévot, quien justificó la medida como un acto de solidaridad ante el «drama humanitario» y las violaciones del derecho internacional por parte de Israel.
Prévot explicó que esta decisión no busca sancionar al pueblo israelí, sino presionar a su gobierno para que respete los principios internacionales y buscar una solución pacífica mediante la vía diplomática. Además, Bélgica impondrá doce sanciones contra Israel, incluyendo restricciones en importaciones, revisiones en las compras públicas con empresas israelíes, prohibiciones de sobrevuelo y tránsito marítimo, y la declaración de ‘persona no grata’ a varios ministros israelíes extremistas, colonos violentos y dirigentes de Hamás.
Este reconocimiento por parte de Bélgica se suma a la lista de países como Francia, Reino Unido y Australia, que en los últimos meses han adoptado decisiones similares para presionar a Israel y promover una solución de dos Estados. La medida belga también refleja un firme compromiso político y diplomático para condenar las políticas expansionistas israelíes y las ocupaciones militares en los territorios palestinos.
Prévot aclaró que la formalización del reconocimiento será oficial mediante un decreto real, una vez que se liberen todos los rehenes y Hamás deje de gestionar Palestina. La decisión interna en Bélgica se produjo tras días de tensión en el gobierno de coalición, que enfrenta diferentes opiniones respecto a cómo responder a la situación en Gaza.
Este paso de Bélgica representa un importante respaldo internacional a la causa palestina y un llamado a la comunidad internacional para buscar una solución justa y duradera al conflicto en la región.
