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Barca sin remos

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Por: Jaime Castillo Copado

¿Vallarta y Bahía?

Los municipios de Puerto Vallarta, en el estado de Jalisco y Bahía de Banderas, en el estado de Nayarit, comparten una serie de elementos naturales, económicos y sociales que a más de alguno le han hecho pensar que podemos, es más, que debemos concebirnos como habitantes de una misma ciudad.

Y es muy probable que quienes piensen en los vallartenses y badebaenses puedan fusionarse en una misma sociedad tengan razón, bajo el entendido de que coexistimos en un territorio denominado desde hace ya varios años como zona metropolitana, principalmente por su vocación económica ligada al turismo.

Con relación al tema, la región vivirá dos momentos de fundamental interés, en primera instancia porque en la semana que comienza se tiene prevista la reunión anual de los empresarios adscritos a la Cámara Nacional de la Industria de la Vivienda, que tradicionalmente suele congregar a los más influyentes políticos, empresarios y estudiosos del desarrollo urbano.

Y segundo, porque con puntual casualidad, un grupo de empresarios aglutinados en una organización denominada Consejo para la Seguridad, Transparencia y Buen Gobierno de Puerto Vallarta A.C., apoyados por la Universidad de Guadalajara, ha determinado celebrar un foro que han llamado: “Hacia una agenda urbana metropolitana”, al que han invitado también a algunos letrados especialistas entre los que destaca José Trinidad Padilla López, en su calidad de Procurador Urbano.

Todo esto bajo el argumento de que se tiene que pensar en una misma ciudad, con un mismo estándar de servicios y con una misma agenda de prioridades, aparentemente y al menos, comenzando por el Desarrollo Urbano.

Lo curioso del asunto es, que para variar son los empresarios, entiéndase la sociedad civil organizada, la que levanta la mano por encima de la chamba que deberían estar haciendo los políticos de Jalisco y del vecino estado de Nayarit, que ni se ven, ni se oyen, cuando se habla de que pongan a trabajar lo que tienen dentro de su cabeza.

Porque francamente no existe en estos momentos ningún político o instituto político que tenga esa capacidad de mirar al futuro con ojos de inteligencia para tratar de emparejar una serie de procesos que deben irse alineando a las intenciones de los empresarios. Comenzando porque las elecciones entre los estados de Jalisco y de Nayarit son a trasmano una de otra, porque mientras los nayaritas elegirán a sus gobernantes en junio próximo, los jaliscienses se verán en las urnas hasta el próximo año, de tal suerte que lo que les importa allá, acá apenas y nos calienta.

Súmele temas ya de más calado, como una agencia metropolitana de seguridad, derroteros para un transporte público unificado o tratamiento de agua potable y alcantarillado, que están lejos, pero lejísimos de verse como parte de una misma agenda. Por eso la exigencia de los involucrados debe ser también más seria, más profunda al mismo tiempo que académica. Porque no se pueden tener conclusiones en donde no se pida a los políticos hacer eso que no acostumbran mucho, y que tiene que ver con pensar en el futuro, allá cuando ellos no van a gobernar y probablemente nadie los recuerde… a menos claro, que hagan uso del pensamiento de un estadista. Pero francamente lo dudo.

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Periodista, resignado Atlista, enamorado de mi ciudad y de mi Estado. De L a V en punto de las 7am al aire @1070noticias http://bit.ly/oYJFU2