Australia ha pasado en unas cuantas semanas del septiembre más seco desde que se llevan registros, al octubre más húmedo en años, contrastaron hoy meteorólogos.
Hace apenas 16 días que terminó septiembre, durante el cual amplias áreas australianas se quedaron sin recibir ninguna cantidad de lluvia, mientras en otras zonas las precipitaciones fueron de 10 a 40 por ciento debajo del promedio del noveno mes del año.
En conjunto, el promedio de lluvia en el todo este país fue 20 por ciento inferior del usual para septiembre, y medido en cantidad fue de solo cinco milímetros, señaló Tom Saunders, meteorólogo de Sky News.
Pero dos semanas después ya se alcanzó en muchas regiones australianas el promedio de lluvia que cae en octubre, y en algunas se cuadruplicó ese promedio.
Por ejemplo en Kargoorlie, ciudad de Australia Occidental, la lluvia de las dos pasadas semanas es de 10 veces la que recibió en todo septiembre, mientras Broken Hill, en Nueva Gales del Sur, pasó de cero a 35 milímetros.
Sauders aclaró a news.com.au que no hay un fenómeno natural que explique las fuertes lluvias de estas últimas semanas, sino a lo más un mes húmedo en un año muy seco.
Y advirtió que siguen altas las probabilidades de que El Niño y el Dipolo del Oceáno Índico salgan de su actual situación neutral, lo que significaría menos y no más lluvia para Australia en su estación primaveral.