El Arzobispo de Guadalajara, Cardenal José Francisco Robles Ortega, ha expresado su postura respecto al reciente rechazo de la iniciativa de ley que permitía a niños y adolescentes transgénero cambiar su acta de nacimiento de acuerdo a su identidad de género. En declaraciones públicas, Robles Ortega sostuvo que es fundamental llevar a cabo un debate más amplio y profundo sobre este tema, involucrando a todos los sectores de la sociedad.
El rechazo de la iniciativa en el Congreso de Jalisco, que se dio con 21 votos en contra y 13 a favor, se produce en un contexto en el que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) había ordenado a los legisladores jaliscienses reconocer el derecho de las infancias trans a cambiar su identidad de género. El Cardenal coincidió con el gobernador Pablo Lemus, quien también se había manifestado en contra de la propuesta legislativa.
Robles Ortega enfatizó la necesidad de un diálogo inclusivo, señalando que «es un tema al que le falta ser debatido profundamente, ampliamente, con la participación de los distintos sectores antes de tomar una decisión consolidada y definitiva». Su comentario refleja la preocupación de que el debate actual no abarca todos los matices y perspectivas necesarios para abordar adecuadamente la situación de las infancias trans en Jalisco.
En otros temas, el Cardenal también se pronunció sobre la salud del Papa Francisco, indicando que su estado es estable y que ha mostrado una leve mejoría. Sin embargo, destacó que el diagnóstico se mantiene reservado, lo que sugiere que los médicos prefieren esperar más tiempo antes de emitir un informe concluyente sobre la recuperación del Pontífice.
Además, Robles Ortega lamentó los recientes hallazgos en un centro de entrenamiento del crimen organizado en La Estanzuela, Jalisco, donde se encontraron restos humanos y otros indicios de violencia. El Cardenal criticó la falta de una intervención exhaustiva por parte de las autoridades, sugiriendo que la magnitud del terreno no debería ser una excusa para no investigar a fondo.
Finalmente, el Cardenal abordó el tema de las manifestaciones del 8 de marzo, expresando su respeto por el derecho a la protesta, pero también subrayando la importancia de respetar los edificios públicos y el patrimonio de particulares. «Se desearía que al ejercicio de una libertad, de un derecho, corresponda una obligación de respeto», concluyó.
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