Las creciente hostilidad del Gobierno mexicano con el Poder Judicial ha generado la alarma entre especialistas y organismos internacionales ante los riesgos de la pérdida de independencia judicial, mientras crece la influencia del Ejército.
La última señal de alerta procede del secretario de Marina, José Rafael Ojeda, al declarar que el «enemigo» está «en el Poder Judicial» porque hay jueces que entorpecen el combate al narcotráfico.