Sergio Chávez Dávalos, presidente municipal de Tonalá, afirmó que ha decido mantenerse al margen de la polémica mediática a la que lo ha querido inducir el diputado local Jorge Arana Arana, por respeto a los habitantes del municipio y la ortodoxia con la que se debe de hacer política.
“Mi agenda de trabajo no la va a marcar el diputado Arana Arana sino las demandas ciudadanas y las enormes necesidades que tiene nuestro municipio y la historia se encargará de poner a cada quien en su lugar. Serán los habitantes del municipio los que, finalmente, juzguen nuestra labor y no una persona en particular. Yo me debo a todos los habitantes del municipio”.
Añadió que la reingeniería administrativa iniciada para alcanzar finanzas equilibradas en el municipio continuará, porque el propósito de ésta es encontrar mejores caminos para servir y atender las demandas ciudadanas y no para atender o satisfacer intereses personales, sino de la sociedad en general.
Cabe recordar que dentro del grupo de empleados del que prescindió el gobierno municipal, la semana pasada, se cuenta a más de 60 empleados que fueron basificados por la anterior administración presuntamente de manera irregular, lo que al parecer motivó que el diputado Arana Arana emitiera declaraciones que descalifican al actual gobierno.
Al respecto, Chávez Dávalos añadió: “no voy a perder el tiempo en dimes y diretes, me he dedicado y voy a seguir en la labor de hacer el trabajo para el que me contrataron los habitantes de Tonalá, que son los que me pagan, es a los que les debo de rendir cuentas”.
De las declaraciones vertidas a medios de comunicación por el legislador Jorge Arana Arana, el presidente municipal Chávez Dávalos dijo que pone a disposición de los comunicadores que lo deseen o de cualquier ciudadano que tenga interés en ello, las pruebas del número de empleados que tenía la administración el primero de octubre de 2015, el acta de Ayuntamiento que prohijó las basificaciones y todos los documentos del litigio de las mismas, los documentos que prueban el monto de la deuda heredada, entre otros que sean de carácter público y que están a disposición de quien los demande.
