La abogada de migración Dulce Miriam García, una «soñadora», como se conoce a los beneficiarios del programa DACA para inmigrantes llegados en la infancia, regresó a California tras una misión de dos meses en que ayudó a cientos de migrantes varados en México a cruzar la frontera en busca de asilo.
“Lo que traigo de regreso es la esperanza”