En un cambio significativo en su política migratoria, México ha pasado de ser un país de tránsito a convertirse en un territorio de acogida para quienes buscan una mejor vida en Estados Unidos. Desde la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, las cifras reflejan un aumento en la regularización de migrantes, con más de 165 mil personas que han obtenido documentos que acreditan su estancia legal en el país en los últimos meses.
Entre octubre y junio de este año, el gobierno mexicano entregó un total de 165,378 tarjetas de condición de estancia regular. De esta cifra, 88,809 corresponden a residentes temporales, representando el 53.7% del total, mientras que 64,020 migrantes, el 38.7%, lograron la residencia permanente. Además, 5,667 personas (3.4%) obtuvieron la condición de visitantes por razones humanitarias, y otros 6,864 (4.2%) son residentes temporales en calidad de estudiantes. También se acreditaron en 18 casos visitantes con fines de adopción.
En la frontera sur, las acciones del gobierno buscan fomentar el comercio, el turismo y el empleo formal. Durante los primeros nueve meses de la actual administración, se expidieron y entregaron 48,875 documentos de facilitación migratoria a personas provenientes de Belice, Guatemala, El Salvador y Honduras. La mayoría de estos documentos, 42,343, fueron entregados a visitantes regionales, principalmente de Guatemala, seguidos por Belice, El Salvador y Honduras.
Desde 2019 hasta septiembre de 2024, México ha emitido un total de 1,560,956 tarjetas migratorias, enmarcadas en una estrategia para promover una migración segura, ordenada y regular, consolidando su papel como destino y no solo tránsito para los migrantes en la región.