Según informes, el presidente Donald Trump muestra signos de frustración debido a la atención mediática centrada en el caso Epstein, lo cual, según fuentes consultadas por Politico, distrae la atención de los logros políticos que su administración busca promover.
Fuentes oficiales de la Casa Blanca señalaron que el equipo presidencial se encuentra “paralizado” y desmotivado por la persistente cobertura de los archivos históricos relacionados con Epstein. Una persona cercana al entorno presidencial afirmó que “el Presidente está claramente furioso”, en referencia a la percepción de que la atención pública se ha desplazado de los temas políticos a los viejos casos judiciales vinculados al financista.
Hasta el momento, la Casa Blanca no ha emitido declaraciones oficiales sobre estas tensiones internas, pero la situación refleja el impacto que los casos judiciales de alto perfil pueden tener en la agenda política y la dinámica del liderazgo en momentos clave.