Inicio INTERNACIONAL Nueva York enfrenta una ola de calor histórica que pone en jaque...

Nueva York enfrenta una ola de calor histórica que pone en jaque a sus residentes

41
0

La ciudad de Nueva York y la costa este de Estados Unidos viven una de las olas de calor más severas en décadas, con temperaturas que alcanzan niveles récord y generan preocupación por su impacto en la salud y el bienestar de la población. La combinación de altas temperaturas y desigualdades sociales ha puesto en evidencia la vulnerabilidad de diversos sectores de la comunidad.

Manuel, un operario ecuatoriano que trabaja en la reparación de fachadas en Manhattan, expresó la dureza de las condiciones: “Hay que soportar, porque si no, ¿de qué vamos a sobrevivir?”, afirmó mientras trabajaba bajo un sol abrasador, con temperaturas cercanas a los 40 grados Celsius. “A veces paramos porque es un peligro. No todos tenemos la misma energía, pero sí hay que soportar”, agregó, al pie de un andamio que ya comenzaba a buscar sombra.

En zonas como Washington Heights, la temperatura superó los 38 ºC al mediodía, en un barrio caracterizado por su gran comunidad latina y escasas áreas verdes. Según el Servicio Meteorológico Nacional, en Central Park se alcanzaron los 35 ºC, la cifra más alta para esa época desde 1888, marcando un récord histórico que refleja la intensidad de la ola de calor que afecta a cerca de 160 millones de personas en ciudades como Washington, Baltimore, Filadelfia y Nueva York.

Las autoridades locales han emitido advertencias y han habilitado centros de refrigeración, especialmente destinados a los adultos mayores y los sectores más vulnerables. “Este calor extremo no solo es incómodo y opresivo, sino que puede ser mortal si no se toman las precauciones necesarias”, advirtió el alcalde Eric Adams, recordando que en la ciudad mueren aproximadamente 500 personas cada año por causas relacionadas con el calor.

La desigualdad social se hace evidente en la respuesta comunitaria. En Washington Heights, centros con aire acondicionado ofrecen alivio y comida a quienes no disponen de recursos para mantener sus hogares frescos. Stephany Cruz, coordinadora de uno de estos centros, comentó: “Muchos viven en cuartos rentados sin cocina, y vienen aquí porque nadie quiere cocinar con este calor”.

La situación también afecta a los trabajadores que enfrentan las altas temperaturas en sus labores diarias. Ronald Marcelin, técnico en reparación de aires acondicionados, expresó con humor: “Estoy recibiendo el calor antes de que todos puedan enfriarse”, mientras atendía a un cliente en un establecimiento comercial.

El Servicio Meteorológico Nacional calificó esta ola de calor como “extremadamente peligrosa para cualquiera sin acceso a refrigeración o hidratación”, subrayando la necesidad de medidas urgentes para prevenir tragedias y reducir riesgos en una ciudad que, año tras año, enfrenta los efectos del cambio climático en su vida cotidiana.

Recibe las últimas noticias y mantente siempre informado en nuestro canal de WhatsApp y Telegram