En un operativo de búsqueda en San Francisco de la Soledad, municipio de Tonalá, autoridades locales encontraron restos óseos calcinados que podrían estar relacionados con la desaparición de Andrea Lizehet, vista por última vez el 31 de diciembre de 2024.
La intervención fue liderada por la Comisión de Búsqueda de Personas de Jalisco, contando con el apoyo de policías estatales, peritos forenses y elementos de la Guardia Nacional. El hallazgo fue reportado a la Fiscalía del Estado, que coordina las investigaciones, mientras el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses realiza el análisis del sitio para determinar si los restos corresponden a la joven.
El operativo incluyó el uso de tecnología avanzada, como drones, sondas metálicas y equipo especializado, para explorar áreas de vegetación densa en la zona. Las autoridades reiteraron su compromiso con las familias de personas desaparecidas y destacaron la importancia de la tecnología en las tareas de localización.
La investigación continúa a cargo del Ministerio Público, quien busca esclarecer los hechos y dar con el paradero de Andrea Lizehet.
