Seis de cada diez mexicanos enfrentan al menos un factor de riesgo para desarrollar enfermedades cardiovasculares, las cuales constituyen una de las principales causas de mortalidad en el país y han comenzado a manifestarse en individuos cada vez más jóvenes, alertaron especialistas de la Asociación Mexicana de Insuficiencia Cardiaca (AMIC).
Durante una conferencia de prensa, el presidente de la AMIC, Adolfo Chávez Mendoza, destacó que el aumento en obesidad, sedentarismo y factores genéticos están contribuyendo a la proliferación de estas enfermedades en segmentos poblacionales cada vez más tempranos. “Lo estamos viendo también mucho porque hay más obesidad, más sedentarismo, hay mucha genética que está impactando también en el desarrollo de estas enfermedades y también porque estamos teniendo gente que se está complicando con enfermedades más tempranamente”, expresó.
El experto recordó que las enfermedades cardiovasculares (ECV) abarcan diversas condiciones que afectan el corazón y los vasos sanguíneos, incluyendo la aterosclerosis, la cardiopatía isquémica, la insuficiencia cardíaca, los accidentes cerebrovasculares y la insuficiencia arterial periférica. Estas patologías son responsables de una alta morbimortalidad a nivel global y, junto con la diabetes tipo 2, representan las causas principales de muerte prematura.
Chávez Mendoza advirtió que la presencia de estas afecciones en edades tempranas está incrementando los diagnósticos de hipertensión en personas de 35 años o menos, lo que aumenta el riesgo de complicaciones severas como infartos o accidentes cerebrovasculares. “Si nosotros logramos un diagnóstico temprano y correcto de la presión arterial elevada, podemos nosotros impactar en el futuro a la disminución de las complicaciones como infarto del miocardio o infartos cerebrales”, afirmó.
En relación con la aterosclerosis, explicó que esta se desarrolla cuando los niveles de lípidos en sangre, particularmente el colesterol LDL o “colesterol malo”, se elevan y se acumulan en las paredes arteriales formando placas que pueden obstruir o reducir el flujo sanguíneo, además de promover la formación de coágulos peligrosos. Datos de la Encuesta Nacional de Salud (Ensanut) 2018 indican que el 30.4% de los mexicanos reportaron resultados anormales en su perfil de lípidos.
El director médico de la farmacéutica Chinoin, Alan Barrell, resaltó que actualmente existen terapias efectivas y seguras para tratar la aterosclerosis, como las estatinas, particularmente la rosuvastatina, que inhibe la síntesis de colesterol de manera potente. También mencionó que para reducir el riesgo de eventos como un accidente cerebrovascular en pacientes con fibrilación auricular, los anticoagulantes orales son una opción eficaz, ya que disminuyen en dos terceras partes las complicaciones por coágulos sanguíneos peligrosos.
Expertos coinciden en la necesidad de promover el diagnóstico temprano y el control de los factores de riesgo para reducir la carga de estas enfermedades en México, donde la tendencia de su incremento en jóvenes sigue siendo un llamado de atención para las autoridades y la población.