Un vuelo regional con destino a Miami se convirtió en escenario de caos el pasado 10 de marzo, cuando un pasajero de 31 años protagonizó un violento incidente a bordo. El hombre atacó a un tripulante de cabina, dañó el asiento de otro pasajero y, en un acto inusual, ingirió un rosario antes de ser detenido tras el aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de Savannah, Georgia.
El vuelo, operado por Envoy Air, una aerolínea regional afiliada a American Airlines, transportaba únicamente a ocho pasajeros. De acuerdo con una declaración jurada presentada por la agente del FBI Savannah Solomon ante un tribunal federal, el comportamiento del pasajero se tornó alarmante poco después del despegue.
La situación comenzó cuando los tripulantes notaron que el hombre mostraba comportamientos erráticos, que incluían gritos incoherentes, movimientos bruscos y temblores. Según detalló la agente Solomon, los síntomas parecían similares a un episodio epiléptico. Al acercarse un tripulante para verificar su estado, el pasajero reaccionó violentamente, propinándole una patada en el pecho que lo lanzó contra una ventana del avión.
Después, el hombre comenzó a golpear y patear el asiento frente a él con tal fuerza que el respaldo terminó colapsando. Ante la escalada de violencia, los pilotos decidieron regresar al aeropuerto de Savannah para garantizar la seguridad de los pasajeros y la tripulación.
Tras el aterrizaje, el acusado intentó dirigirse hacia la salida del avión y lanzó golpes contra otro miembro de la tripulación. Finalmente, fue reducido por otros pasajeros antes de ser entregado a las autoridades locales.
El hombre fue arrestado por la policía del aeropuerto y trasladado a un hospital local debido a la ingesta de un rosario, según consta en la declaración jurada del FBI. Posteriormente, fue ingresado en la cárcel del condado de Chatham, donde enfrenta cargos por agresión menor, obstrucción a la policía y daños criminales a la propiedad, este último considerado un delito grave.
Además, la agente Solomon afirmó que existen fundamentos para acusarlo de interferir con la tripulación de vuelo, un delito federal que podría acarrear severas penas de prisión.
La hermana del pasajero, quien viajaba con él, ofreció detalles sobre el posible trasfondo del incidente. Según declaró al FBI, ambos se dirigían a Haití con el objetivo de escapar de lo que describió como “ataques religiosos de naturaleza espiritual”. Antes de que comenzara el episodio violento, el hombre le habría pedido que cerrara los ojos y rezara, asegurando que “los discípulos de Satanás” los habían seguido al avión.
La mujer también explicó que su hermano ingirió el rosario porque lo consideraba un “arma de fortaleza en la guerra espiritual”. Sin embargo, negó que él padeciera problemas de salud mental o condiciones médicas previas.
Con información de Infobae.
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