Teuchitlán, Jalisco – La presidenta del colectivo Luz de Esperanza, Liliana Mesa, y otra activista fueron presuntamente abandonadas en el municipio de Teuchitlán por los camiones que la Fiscalía General de la República (FGR) había dispuesto para trasladarlas al Rancho Izaguirre. La denuncia fue realizada por Héctor Flores, un miembro del colectivo, quien cuestionó las decisiones de la FGR en este incidente.
Flores expresó su preocupación ante la falta de acompañamiento y la decisión de dejar a las activistas en el pueblo, a pesar de la situación de violencia que se vive en la región. “¿Por qué las dejan en el municipio? ¿Por qué no les esperan? ¿Por qué no les dieron acompañamiento?”, se preguntó. Según él, la irresponsabilidad de la FGR pone en riesgo a las activistas, lo que considera un “abuso de autoridad” y un “desdén hacia las familias”.
Las activistas, que solicitaron permiso para ir al baño durante el traslado, fueron olvidadas y, al no tener otra opción para llegar al rancho, tuvieron que pedir ayuda a una patrulla de la policía municipal. Flores también sugirió que la visita al rancho podría haber sido un “montaje” y una burla hacia las familias de las víctimas, lo que añade un matiz de desconfianza hacia las acciones de la Fiscalía.
Este incidente ha suscitado inquietud entre los miembros del colectivo Luz de Esperanza y ha puesto de relieve la necesidad de un mayor respeto y protección para quienes luchan por la justicia en el país.
Recibe las últimas noticias y mantente siempre informado en nuestro canal de WhatsApp y Telegram
