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La inversión inmobiliaria comercial y de viviendas en el país podría alcanzar los 580 mil millones de pesos este año; un 13% más que en 2022

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• Urge AMPI a destrabar en el Congreso la Ley para Regular la Prestación de Servicios Inmobiliarios en Jalisco, dado el crecimiento del sector.

• “Sería de gran beneficio cerrar filas hoy y sumar esfuerzos en torno a la tarea de los promotores y asesores, en vez de plantear ahorita cuestiones que son mucho más radicales o de ejecución tan compleja como imponer a los ayuntamientos funciones de promotores inmobiliarios como ha propuesto algún diputado”, puntualizó el presidente de la asociación, Mario Romo Alarcón.

El auge inmobiliario que vive en la actualidad la Zona Metropolitana de Guadalajara hace más compleja la compra, venta y renta de propiedades, por lo que la participación de asesores con experiencia y ética comprobables en este tipo de transacciones juega cada día un papel más decisivo para que el sector mantenga un crecimiento sostenido, que además de atraer ganancias a los inversionistas, genere beneficios sociales, al ampliar posibilidades y el rango de precios en el mercado local.

Así lo consideró el presidente de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) Guadalajara, Mario Romo Alarcón, al recordar que para este 2023 la inversión inmobiliaria comercial, en viviendas, hoteles, oficinas, naves industriales y residencias vacacionales podría alcanzar los 580 mil millones de pesos en la escala nacional, cifra que representaría un alza de 13%, con respecto a los 511.5 mil millones de pesos con los que se cerró en 2022.

“La perspectiva inmobiliaria en México es muy optimista, pues, por ejemplo, y contrario a algunas previsiones de contracción en el mercado, durante este año las ventas de bienes raíces se han incrementado en un ocho por ciento”.

“Este sector se ha convertido ya en un motor importante de la economía y, como tal, debe contar con la debida atención, tanto de las autoridades de todos los niveles, como de los empresarios, de los inversionistas y de la sociedad en general, para juntos desarrollar un modelo en el que predomine la legalidad, y que esa riqueza que es capaz de producir no se nutra a expensas de abusos, estafas o mera especulación”, advirtió.

Por ello, subrayó, es necesario que, a la par de las regulaciones legales que por lógica deben darse en todo tipo de negocios, se desarrolle aquí en Jalisco un perfil profesional y de trayectoria para acreditar a quienes brindan servicios de asesoría y promoción inmobiliaria, “pues se trata de una figura que de muchas maneras repercute en el nivel de confianza que hay sobre este sector y, por ende, en que ese auge se mantenga en forma de éxito sostenido”.

Para dar contexto sobre la oportunidad que hay en este momento de establecer reglas claras, el especialista compartió algunos datos: “Jalisco tiene la posición tres a nivel nacional en el ranking de los Estados en cuanto a la demanda de propiedades residenciales, comerciales, industriales, oficinas y terrenos en venta y renta. En el caso de Guadalajara, la ciudad continuará incrementando la plusvalía de sus inmuebles, Las colonias con mayor plusvalía en la Zona Metropolitana de Guadalajara son las ubicadas en el norponiente como: Puerta de Hierro, Royal Country, Solares y Providencia”.

“Las oportunidades de inversión han aumentado en el mercado de bienes raíces tapatío: Dos zonas que han sido referentes importantes de esta dinámica en vivienda vertical son el Sector Financiero al norponiente de la ciudad y el Corredor Patria o Zona Andares. Además de las dos zonas mencionadas, existe una gran demanda de proyectos comerciales en la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG).  En cuanto a la oferta de vivienda nueva, cuenta con 295 proyectos en venta, con un total de 38 mil 987 unidades y con un inventario de 12 mil 785”.

Aunado a esto, agregó, la consolidación de la vivienda media y los desarrollos verticales en estas mismas áreas ha sido tal que se prevé todavía más crecimiento y dinamismo: “La tendencia ha sido mayormente orientada a la renta de departamentos, esto es una buena noticia para la inversión en bienes inmuebles, por lo tanto, la renta mensual del año 2023 podrá subir un 2% respecto al año pasado”, refirió.

Frente a esta coyuntura, el presidente de AMPI Guadalajara llamó de nuevo la atención sobre la necesidad de dotar con un esquema de confianza y transparencia al sector. En este punto reiteró que la Ley para Regular la Prestación de Servicios Inmobiliarios en Jalisco-aún estancada en el Congreso local a la espera de ser aprobada- sería un excelente primer paso.

Y es que en el Estado operan alrededor de 10 mil asesores inmobiliarios independientes sin certificaciones y que tampoco forman parte de ningún registro de profesionistas.

Asesores inmobiliarios certificados, un factor que puede contribuir al equilibrio del mercado

El costo desproporcionado que pueden alcanzar las rentas en la Zona Metropolitana es una preocupación que se ha externado con insistencia en los últimos tiempos. Sin embargo, para el presidente de AMPI Guadalajara, aun cuando en el fondo los precios se mueven en el sentido que dictan la oferta y la demanda, lo cierto es que es posible desalentar muchos casos de especulación, cuando en el mercado local participa un grupo de promotores y asesores debidamente capacitados y competitivos, que además están guiados por el reconocimiento oficial de sus conocimientos y experiencia.

“Las rentas altas que están así por el mercado, por la dinámica de oferta y demanda. Lo que podemos hacer los asesores inmobiliarios es estar bien capacitados, trabajar bajo parámetros homologados para alentar que haya precios adecuados, y, de ese modo, garantizar transacciones exitosas para quienes ofrecen el inmueble, y a la vez convenientes para quienes pretenden rentar. Con esta participación responsable contribuimos a equilibrar el mercado”.

“En AMPI GDL apostamos hoy a la capacitación y certificación en nuestra actividad, pues quienes nos dedicamos a esta industria, tenemos una gran responsabilidad en nuestras manos. Y de eso se trata precisamente esta ley que está atorada, y sobre la cual debemos ser muy claros, para evitar confusiones: no se trata de una iniciativa que aborde todas las aristas del sector, pues incluso algunos la mencionan como Ley Inmobiliaria y no hay tal cosa; sino que es un esfuerzo por abordar en primera instancia el trabajo de las y los asesores y promotores inmobiliarios”.

“En ese sentido, también estamos a favor de participar en las acciones para prevenir delitos patrimoniales como la falsificación de documentos y la suplantación de identidad, dos acciones ilícitas que ocupan los primeros lugares de incidencia en el sector de los negocios y las transacciones con viviendas”.  

“Sería de gran beneficio cerrar filas y sumar esfuerzos en ambos temas, en vez de plantear ahorita cuestiones que son mucho más radicales o de ejecución tan compleja como imponer a los ayuntamientos funciones de promotores inmobiliarios, tal como lo ha propuesto por ahí algún diputado local”, puntualizó Romo Alarcón.

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