El tostado de los pimientos verdes con luz solar concentrada, en lugar del calentador a propano, produce chiles «sabrosos y aromáticos, y reduce las emisiones de dióxido de carbono», según las conclusiones de un experimento en Nuevo México (EE.UU.).
La prueba la encabezó Kenneth Armijo, un ingeniero del Laboratorio Nacional Sandia que creció en una granja de pimientos en Sabinal, entre Albuquerque y Socorro, y que presentará el estudio la semana próxima en una conferencia sobre energía y sustentabilidad de la Sociedad Estadounidense de Ingenieros Mecánicos.