Los cines de EE.UU. buscan sobrevivir en un mundo pospandemia que ha revolucionado el negocio: Ofrecerán comidas, suscripciones y pases privados, las películas estarán menos tiempo en la cartelera y competirán con las plataformas de «streaming» por los grandes estrenos.
Hollywood es consciente de que casi el 40 % de sus ingresos en taquilla dependen de un 10-15 % de la población que acude regularmente a los cines. Recuperar a ese público fiel será uno de los primeros objetivos para las salas de proyección, que afrontan la llegada de una avalancha de títulos a partir de la próxima semana.