1. Comienza todos los días bebiendo agua tibia con limón
Este sencillo paso ayuda a estimular las funciones del hígado y le dará más energía a tu cuerpo para comenzar el proceso de digestión. Además es una excelente manera de eliminar toxinas a primera hora del día.
2. Haz algunas mini ayunas
Trata de cenar máximo a las 7pm; esto le dará a tu cuerpo de 12 a 14 horas entre la cena y el desayuno, lo que funcionará como un mini ayuno. Ayunar de manera intermitente puede darle un descanso a tu sistema digestivo. También limpiará tu hígado y reducirá la inflamación.
3. Aparte un tiempo para consentirte
Bájale un poco a tus fiestas y quédate unas noches en casa para consentirte. Toma baños calientes, lee novelas románticas, haz yoga o consiéntete con un delicioso masaje.
4. Toma té
Despídete del alcohol un rato y toma té de hierbas. Tomas tés que contienen jengibre o diente de león tienen el beneficio extra de apoyar tu digestión mientras eliminas toxinas.
5. Incrementa tu consumo de fibra
Consumir alimentos altos en fibra te ayuda a regular tu digestión. Hacer esto es súper importante para mantener una salud general de tu sistema digestivo. Esto te ayudará a eliminar toxinas acumuladas en el colon.
6. Evita azucares, carne roja, pan y comida procesada
Estos alimentos son con frecuencia causas de inflamación. ¡Tranquila! No les tienes que decir adiós para siempre, pero elimínalos de tu dieta por lo menos una semana. Te sorprenderás de lo liso que permanecerá tu abdomen y te sentirás de maravilla.
7. Ejercítate
El ejercicio ayuda a estimular la digestión y la claridad mental. No tienes que empezar el año con un plan de cardio, pero aunque sea un movimiento ligero como caminar, ayudará a tu sistema digestivo.
8. Cocina en casa
Podrían haber muchas calorías escondidas en los platillos preparados en restaurantes. Comer en casa te da el control de escoger los ingredientes, las calorías y las porciones. Cocinar también podría ser relajante y bueno para ti.
9. Medita
La meditación es una forma gentil y efectiva para limpiar tu mente y tu cuerpo. Esto también podría ayudarte a controlar tus antojos por la comida y realmente sentir cómo se siente tu cuerpo cambiando tu alimentación y tus hábitos. Lo ideal es meditar de 10 a 20 minutos por día.
