En una acción conjunta entre las autoridades mexicanas y estadounidenses, 26 fugitivos mexicanos acusados de delitos graves y relacionados con organizaciones criminales internacionales fueron entregados a las autoridades estadounidenses. La operación, que contó con la colaboración del Gobierno de México, permitió la captura y traslado de estos individuos, incluidos líderes de cárteles de droga y miembros de organizaciones terroristas extranjeras, así como responsables de tráfico de personas.
Los detenidos enfrentan cargos que van desde narcotráfico y lavado de dinero hasta secuestro, toma de rehenes y asesinato. Entre los principales responsables se encuentran figuras vinculadas a los cárteles de Sinaloa, Jalisco Nueva Generación (CJNG), Noreste (antiguo Los Zetas) y organizaciones terroristas designadas internacionalmente. La operación busca fortalecer la lucha contra la criminalidad transnacional y reducir la violencia asociada a estos grupos en Estados Unidos.
La Fiscal General de Estados Unidos, Pamela Bondi, destacó la importancia de la cooperación internacional: “Este esfuerzo refleja la determinación de nuestra administración por desmantelar organizaciones criminales que operan en múltiples países. La captura y extradición de estos fugitivos es un paso fundamental para garantizar la seguridad de nuestras comunidades”. Además, agradeció a las autoridades mexicanas por su colaboración en el operativo.
Entre los fugitivos transferidos se encuentran:
- Abigael González Valencia, alias “Cuini”, líder de Los Cuinis, responsable del tráfico de drogas desde Sudamérica hacia EE. UU.
- Kevin Gil Acosta y Martín Zazueta Pérez, encargados de la seguridad y protección de los laboratorios de fentanilo del Cártel de Sinaloa, y acusados de ataques contra funcionarios mexicanos con armas militares.
- Abdul Karim Conteh, ciudadano de Sierra Leona, presunto cabecilla de una organización dedicada al tráfico de migrantes provenientes de diversas regiones, mediante métodos clandestinos como túneles y escaleras.
- Leobardo García Corrales, vinculado al Cártel de Sinaloa, acusado de traffico de fentanilo y relacionado con armas de uso militar.
- Luis Raúl Castro Valenzuela, conocido como “Chacho”, implicado en el secuestro de un ciudadano estadounidense.
- Juan Carlos Félix Gastélum, “El Chavo Félix”, presunto operador de laboratorios clandestinos de metanfetamina en la Sierra Madre, con conexiones familiares en el liderazgo del Cártel de Sinaloa.
- Roberto Salazar, buscado por su implicación en el asesinato del oficial del Sheriff del Condado de Los Ángeles en 2008.
- Pablo Edwin Huerta Nuño, conocido como “Flaquito”, líder de una plaza en Tijuana, responsable de la distribución de grandes cantidades de metanfetamina, fentanilo y cocaína en la región de San Diego y Los Ángeles.




Se espera que estos individuos comparezcan en los próximos días ante tribunales federales en diferentes jurisdicciones de Estados Unidos, donde serán procesados por sus delitos.
Este operativo reafirma la voluntad de las autoridades estadounidenses y mexicanas de coordinar esfuerzos para combatir el crimen organizado transnacional y reducir la violencia asociada. La colaboración internacional continúa siendo clave en la lucha contra las organizaciones que amenazan la seguridad y el bienestar de ambas naciones.