Cansancio, mal humor, dolor de cabeza y desesperación son algunas sensaciones que experimentas cuando no descansas bien. A esto se le suma que si duermes mal podrías vivir menos.
La forma en cómo duermes determina tu estado físico, mental y, principalmente tu estad de salud”, asegura Reyes Haro, especialista en neurofisiología clínica por el Instituto Nacional de Neurología.
El miembro del Instituto Mexicano de Medicina Integral del Sueño asegura que quienes duermen mal vivirán menos.
Dormir menos acelera en los procesos genéticos el desarrollo de enfermedades que existen en tu historia familiar como niveles altos de triglicéridos o colesterol, hipertensión, diabetes y síndrome metabólico”.
Por esta razón, se reduce la expectativa de vida entre quienes duermen mal, trabajan en la noche o tienen turnos prolongados o “rotatorios”.
Esto pasa si duermes menos de seis horas…
Un estudio publicado en el American Journal of Preventive Medicine revela que quienes duermen menos de seis horas reducen gasta cinco años de vida, se divorcian tres veces más que aquellos que sí descansan bien, y tienen 40% más posibilidades de padecer trastornos neuropsicológicos, digestivos y cardiovasculares.
Además, si trabajas de noche y duermes de día es más común que presentes insomnio, irritabilidad, angustia, depresión, ataques de pánico, enfermedades cardiacas y adicción a medicamentos.
Para evitarlo, el especialista Reyes Haro recomienda poner en práctica tres hábitos que te brinda un sueño de calidad:
Tener las condiciones adecuadas
Que el sueño sea continuo (lo menos interrumpido posible)
Que el sueño sea profundo
Una buena higiene del sueño favorece el descanso saludable y te mantiene alerta durante el día. ¡Anímate a practicarlas!
