Si últimamente te has sentido ansiosa, triste, te ves al espejo y te miras con más kilos de los acostumbrados o tu rostro está lleno de granos, podría deberse a un desequilibrio hormonal.
Muchas veces creemos que este tipo de desajustes con las hormonas sólo los pasan mujeres que acaban de ser madres o quienes tienen la menopausia, pero no te confíes pues esto no es así.
Un estudio de la Universidad de Jinnah (Pakistan) enlista diversos cambios que podría experimentar la mujer sin importar la edad que tenga. ¡Toma nota!
Se te olvidan las cosas
Si olvidas lo básico como dónde pusiste tu bolso, llaves o hablarle a alguien, tal vez podrías tener un problema hormonal. Esto ocurre porque tu cuerpo produce altos niveles de la hormona cortisol, la cual obstaculiza tu capacidad de memoria.
Te cuesta mucho bajar de peso
No entiendes por qué si haces ejercicio constantemente y comes sano, la báscula sigue registrando más peso que el que tenías. Tranquila, tus hormonas pueden estar detrás de esto.
Acné
Aunque tengas una buena higiene, puedes tener constantemente brotes de granos y espinillas. Los responsables de esto pueden ser los andrógenos (hormonas masculinas como la testosterona) que estimula el exceso de producción de sebo y se funde con las bacterias que causan imperfecciones en la piel.
Cansancio constante
A pesar que descansemos correctamente, a la mañana podríamos seguir sintiendo cansancio, que es un signo muy común de desequilibrio hormonal.
Bajo estado de ánimo
Cuando los niveles de la glándula tiroides están bajos podemos tener cambios fuertes en el estado de ánimo como depresión, ansiedad e irritabilidad.
Sudor en exceso
Esta es una típica señal de desequilibrio hormonal; con frecuencia se presenta sofocos, palpitaciones y hormigueo por las noches.
Caída del cabello
Normalmente podemos perder 100 cabellos al día, pero cuando la falta de testosterona o de la Dyhydro Testosterona (DHT) puede hacer que perdamos más cabellos.
Si tienes alguna de estas señales de desequilibrio hormonal, no dudes en acudir con un especialista para que te valore y determine qué tratamiento es el que más te conviene. ¡Cuídate!
