El Gobierno de Guadalajara cuenta con el visto bueno de la Secretaría de Cultura del Estado de Jalisco y de la Escuela de Conservación y Restauración de Occidente (ECRO) para comenzar con los trabajos para el análisis, diagnóstico técnico y elaboración del proyecto ejecutivo para la restauración de La Minerva. Esta primera etapa de intervención dará como resultado los cómos para su intervención, afirmó Hugo Luna Vázquez, jefe de Gabinete del Gobierno de Guadalajara.
Luna Vázquez leyó el documento enviado por la Secretaría de Cultura y firmado por el arquitecto Julio César Herrera Osuna, Director de Patrimonio Artístico e Histórico, dirigido al arquitecto Ricardo Agraz, director de Proyectos del Espacio Público del Gobierno de Guadalajara, donde comunica que el resultado de este análisis servirá de base para hacer la propuesta de intervención.
Hugo Luna también explicó que la intervención podría incluir tres etapas. La primera relativa a diagnóstico técnico y proyecto de intervención, la segunda sería la restauración de La Minerva, y la tercera el reforzamiento de la base de cimentación que recibe a La Minerva. El techo financiero «máximo» para las 3 etapas es de ocho millones de pesos. Todo dependerá del análisis que estará llevando a cabo el equipo de restauradores multidisciplinario, encabezado por la especialista Karla Jáuregui.
Respecto a lo que se ha señalado con relación a que si La Minerva será removida de su lugar para su intervención, así como para la restauración de la base de la misma, aunque todavía no se tiene todavía el resultado de los estudios, todo indica que tendrá que ser removida; sin embargo, no se hará nada hasta que no se tenga el dictamen técnico terminado y el proyecto ejecutivo aprobado.
Es importante destacar que el Gobierno de Guadalajara también cuenta con el aval de la Escuela de Conservación y Restauración de Occidente (ECRO) para estos trabajos. Su director, Alejandro Canales Daroca, emitió una opinión técnica donde considera adecuada la intervención en dos etapas, la primera de diagnóstico exhaustivo que dará la información necesaria para precisar los materiales de la escultura y conocer el grado de deterioro y la segunda fase que consiste en la propuesta de intervención de restauración.
