A través de un punto de acuerdo suscrito por 21 senadoras y senadores de distintos partidos políticos, el Senado de la República solicitó a la Secretaría de Hacienda, a la Secretaría de Educación Pública, y a la Secretaría de Salud, que hagan un trabajo coordinado y emprendan acciones para combatir efectivamente la obesidad y el sedentarismo, a partir de los recursos recaudados por el IEPS que se impuso en 2014 a los productos con alto contenido calórico.
Particularmente, los legisladores exigieron que se destinen recursos públicos provenientes de ese gravamen, para construir infraestructura y promover la actividad física en todos los niveles educativos del país, así como emprender el diseño e implementación de programas sociales, educativos y de salud dirigidos a combatir el sedentarismo, la obesidad y el sobrepeso, así como las Enfermedades Crónicas no Transmisibles, que la falta de actividad puede detonar, como la diabetes mellitus, la hipertensión arterial y las enfermedades cardiovasculares.
Ante los señalamientos de que no se han destinado recursos para la construcción de los bebederos públicos que se comprometieron previo a la autorización en el Congreso del IEPS, los senadores establecieron que es necesario que las tres secretarías involucradas apoyen “el incremento en la cobertura de los servicios de agua potable en localidades rurales, y proveer bebederos con suministro continúo de agua potable en inmuebles escolares públicos con mayor rezago”.
Para ello, los senadores proponen la creación de un “Fondo para la Prevención del Sobrepeso y la Obesidad y Enfermedades Crónicas no Transmisibles”, que se constituiría en forma de un Fideicomiso Público, en términos de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, con posibilidad de aportaciones por el sector privado y social.
Dicho Fondo para la Prevención del Sobrepeso y la Obesidad y Enfermedades Crónicas no Transmisibles, plantea el punto de acuerdo, deberá contar con un Comité de Expertos cuyo objetivo sea el de diseñar e implementar una serie de reglas de operación para garantizar el uso cabal de los recursos destinados al Fondo, así como la evaluación de impacto de los mismos.
De acuerdo con las consideraciones expuestas por los legisladores, se estima que 58.6% de los niños y adolescentes de 10 a 14 años no refieren haber realizado alguna actividad física organizada de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición ENSANUT 2012. Es por ello, explican, que resulta imprescindible que los planteles educativos cuenten con la infraestructura necesaria para que los niños y jóvenes puedan realizar actividad física diariamente.
El punto de acuerdo propone que realmente el impuesto cumpla con esa doble finalidad, no sólo que sea una herramienta útil a la recaudación, sino que esos recursos realmente se apliquen en donde tienen que aplicarse. Este año, se prevén ingresos por más de 21 mil millones de pesos por el IEPS a bebidas azucaradas, de los cuales, una buena parte, si no es que todo, debería ser dirigido a programas sociales, educativos y de salud que ayuden a combatir la obesidad, el sobrepeso, y la diabetes, así como para el acceso y disponibilidad al agua potable en escuelas, espacios públicos y zonas rurales.
