El gobierno español acordó este viernes la extradición a Estados Unidos del empresario mexicano Juan Manuel Muñoz Luévano, alias ‘Mono Muñoz’, sospechoso de ser el enlace del poderoso cártel mexicano de Los Zetas en Europa.
El ‘Mono Muñoz’ tiene una acusación pendiente ante un tribunal en Texas por narcotráfico, blanqueo de dinero y posesión de armas, delitos que presuntamente cometió al frente de una organización que introdujo cocaína de México a Estados Unidos entre la década de 1990 y 2015.
El gobierno español aprobó la entrega del hombre, también conocido como ‘El Ingeniero’, a la justicia estadounidense, según un comunicado oficial del Consejo de Ministros de este viernes.
Muñoz Lúevano fue arrestado el 18 de marzo en Madrid, en una vivienda de la lujosa urbanización La Moraleja donde residía desde hacía años.
Desde allí, supervisaba sus negocios ilícitos en México y coordinaba la entrada de droga de Los Zetas en Europa, según una investigación del diario El País, que tuvo acceso a un informe policial.
También colaboró «de forma independiente» con los cárteles mexicanos de Sinaloa, el Golfo y Beltrán-Leyva, desde la capital española, señaló el Gobierno.
El ‘Mono Muñoz’ mantenía estrechas relaciones con políticos y funcionarios judiciales en México, según El País.
En conversaciones grabadas durante varios años del sospechoso, se le escucha amenazar a personas que le debían dinero en México, así como ordenar palizas, secuestros y hasta asesinatos a sus socios de allí, informó El País, citando la narración policial.
Para proteger sus intereses y sus rutas de distribución en Estados Unidos, la organización del ‘Mono Muñoz’ compraba armas a Los Zetas, mientras que el dinero obtenido era blanqueado «a través de varios negocios de su propiedad», agregó el gobierno español.
Muñoz fue arrestado en el marco de una investigación en España por blanqueo de capitales contra Humberto Moreira Valdés, el expresidente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), al que pertenece el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto.
Moreira Valdés fue detenido al llegar a Madrid en enero de 2016, pero fue puesto en libertad tras declarar ante el juez. Regresó a México y, días después, el magistrado decretó el archivo del caso por falta de pruebas.
En ese momento, el expresidente del PRI negó toda vinculación con el ‘Mono Muñoz’ o con Los Zetas.
