Como responsables de la instalación de albergues temporales, personal del Sistema DIF Guadalajara impartió esta semana una capacitación a empleados de diversas áreas del Ayuntamiento tapatío que, por sus funciones y competencias, colaboran con este organismo ante afectaciones por lluvias.
Luis Rodríguez Peña, director de Protección Civil de DIF Guadalajara, explicó que la instalación y administración de un refugio temporal activa a varias dependencias: “un refugio temporal tiene ocho áreas como administración, trabajo social, área médica, área de alimentación, de seguridad, cocina, psicología y almacén, por lo que son varias las dependencias que coadyuvan para el funcionamiento de estos albergues provisionales”.
El Sistema DIF es el responsable del buen funcionamiento de los refugios, por lo que es el primer interesado en que estén bien capacitados empleados de bomberos, policía municipal, protección civil, desarrollo social, servicios médicos y participación ciudadana de Guadalajara.
Hasta el momento son 13 los espacios que estarían destinados a convertirse en refugios, y cubren varias zonas de la ciudad, ya ubicadas como problemáticas en temporal de lluvias. Para equipar estos albergues, el Sistema DIF realiza la compra de catres, cobijas y colchonetas; además de kits de productos de limpieza de lugares y aseo personal.
Rodríguez Peña detalló que en una situación de emergencia, a DIF Guadalajara le corresponde no sólo la instalación de refugios temporales, sino también el análisis de la evaluación de daños para poder hacer acopio y entrega de los apoyos.
“DIF realiza también evaluaciones de daños desde el enfoque sociofamiliar, para suministrar a las personas afectadas no sólo víveres y artículos materiales, sino un apoyo más integral”.
El Sistema DIF Guadalajara y el Ayuntamiento tapatío han hecho un trabajo preventivo importante de cara al temporal de lluvias: “Han detectado un aproximado de 450 familias en situación de riesgo y nosotros estamos en proceso de actualización de 13 refugios, para garantizar que tengan la mejor infraestructura y se pueda dar ahí el mejor servicio”.
Estos albergues se instalarían en espacios públicos como unidades deportivas, y en áreas donde no afecten la actividad productiva de las colonias, por lo que tratarían de evitar instalar refugios en escuelas y centros de desarrollo comunitario.
Algunas zonas de riesgo identificadas en la ciudad son la colonia Ferrocarril, Lomas del Paraíso, Barranca de Huentitán y en las inmediaciones de Igualdad y Calzada Independencia.
